POESÍAS

VISIÓN

He visto mi ángel interior,
El guardián de mis secretos,
El sueño prohibido del todopoderoso
Y he llorado con un místico silencio
Sobre el jardín de mis angustias.

REALIDAD

La realidad es un vampiro
Que no se proyecta en el espejo
Es un sueño errabundo
Que transciende en un silencio hostil
Y que cambia como un camaleón
Que no halla su esencia.

TERNURA

La ternura se hace mujer
Para seducirme con su mirada
Y así mis ojos quedan atrapados
En los sueños de su esencia
Y en el veneno de su cuerpo

INSTANTE

La obra de dios
Se entrelaza con mis palabras
Y me bendice con un misterio
Donde no puedo soñar
Y donde lo incierto solo es…
Un viento lejano y pasajero

CUENTO

Donde los ángeles duermen
Está ella, la joven princesa
La cenicienta de este mundo inerte
La caperucita de colores bizantinos,
La bella durmiente del amanecer
Con la que he soñado estar siempre
Y a la que nunca podré amar.

PRISIONERO

El mar escupe sus lamentos
Sobre el césped de mis ilusiones
Obligándome a conquistar la piel de la ternura
A dominarla con encantos ficticios e inertes
Y a sentir su sonrisa hipócrita e indefinible

VAGABUNDO

Rodeado de seres inertes
Camino en busca de la verdad
Y solo hallo palabras abandonadas por la sed de la lujuria
En un mar de negros callejones

FENIX

Resurjo desde mi interior
Para buscar el fuego divino que he extraviado
En los malos instantes roto por el ayer
Y en el espejo azul de mi memoria
Ha navegado con nostalgia y desazón

POEMA

Ahogándome entres suspiros
Y resurjo desde mis cenizas
Y busco el guerrero del arco iris
Para que ilumine mi vil inocencia
y me lleve a soñar en su universo
De colores y esperanzas fugitivas.

OBSESIÓN

En la memoria del tiempo
Esbozo los sueños de mi pincel
Para pintar con la lujuria del sol
La majestuosidad de Venus
Y enlazarme siempre a ella
Como un grito de amor

SUPLICA

Suplicándole al espíritu de los fracasos
Ha vivido el prisionero de la soledad,
El inocente guardián de las rosas
El que solo anhela algún día hallar el silencio
De sus pecados de juventud

ELLAS

Mujeres vestidas de sol
Huyen hacia el lugar de la calavera
Buscando refugio para sus sueños
E intentan hallar su paz interior
En los jardines de la miseria

PECADOR

Devorando mis pecados
Me encamino al abismo de mi historia
Y escucho el ruido de mi conciencia
Atormentar las palabras de mi corazón
Y busco en la inocencia del ángel de la guarda
El secreto final de mi arrepentimiento

SIRENAS

En el canto de las sirenas
Reposa el dolor de los dioses abandonados
En la memoria perpetua del Olimpo
Y solo en el umbral de sus palabras de amor
Se oculta la inocencia de un ángel prisionero
En la eterna soledad de la incertidumbre

TÚ

Tu sombra muerta en el espejo
Camina bajo los horizontes de la ausencia,
Tus labios envenenados de amor
Invitan a morir en la penumbra de tu historia
Tu alma marchita por el dolor del tiempo
Se cierra en la puerta de la eternidad
Y así mujer caminas solitaria por la década
Que se enlaza en la ruta del destino

PUERTA

En las puertas de la ausencia
Desnudo mi alma al rey sol
Y le ofrezco las palabras que contemplo en mi ser
En las puertas de la ausencia
Oculto cada lamento de mi corazón
Y olvido la incertidumbre de mi mente
Y observo el llanto de las paredes
Sonreír con la demencia del tiempo

DECADA

En la década de los misterios
Los rivales comulgan con la eternidad
Que se percibe en el alma del sol
Y allí ocultan el arcano de lo efímero
Para santificar el divino crepúsculo
De un alma perdida en la inmensidad

ANHELO

Sobre las páginas blancas
Del libro de la espera
Anhelo pintar el color del tiempo
Y tatuarlo de arreboles
Para santificar el espíritu
De los discípulos de Emaus

ESCAPANDO

Escapando de la inocencia
Huyen los prisioneros de la piel
Y buscan ansiosos hallar lo incierto
Del aquelarre exótico y olvidado
Para seguir huyendo como lobos
En busca de su triste final

RECLAMO

En medio de la oscuridad
Los ojos de la envidia me observan
Escribir en tu cuerpo de mujer

SORPRESA

Al despertar
Descubrió que sus sueños se morían
En ese lugar de encantos
Donde el tiempo
Le enseña un nuevo amanecer

CUADRO

El vino se derrama sobre la mesa
Donde los duendes se bañan cuando llega la noche
Las manzanas que adornan la mesa junto a las flores amarillas
Se duermen al ritmo de la música de aquel viejo piano
Que con fantasía toca la reina del pecado
El cuadro de Da Vinci que cuelga en aquel comedor
Se burla de toda la demencia que con sus ojos mira
Y los chasquidos de la cuchara ahogan la armonía
Que con ternura viene ejecutando la voz del silencio

OTEANDO

La hija de la luz
Bebe el vino de la ansiedad
Lo contempla con su mirada de ángel perdido
Y lo acaricia con su ternura de cáliz bendito
La hija de la luz
Vuela en sus sueños a nueva york
Le canta a los fríos atardeceres de la magia
Le habla a los pájaros que dibuja el viento
La hija de la luz
Escribe entre las líneas de mis ojos
Estas palabras confusas y melancolicas